top of page

El descenso

  • facundocastro18
  • 12 oct 2022
  • 2 Min. de lectura

Hacía calor y caminábamos sin rumbo, al pedo, porque estábamos de vacaciones. Siempre pensamos que nosotros, los pibes de Lugano, éramos el centro del universo, que no teníamos competencia, los number one. Hasta que nos cruzamos con él. No sabemos de donde apareció, pero nos dijo la palabra mágica “marihuana” con un acento tumbero, y nos dimos vuelta todos para ver de dónde venía ese canto de sirenas.

El flaco nos hizo un chamuyo de lo mejor y entramos como unos giles, nos dijo que conseguía lo que queríamos y al mejor precio si lo acompañábamos. El verso fue bueno, porque no nos dijo que le diéramos la plata y que él lo traía, en esa no hubiéramos entrado, lo teníamos que acompañar. Designamos a Pablo y a Gastón para que acompañen al proveedor casual hasta el dealer de turno.

Cuando pasó una hora, el resto que nos habíamos quedado en la esquina esperando, nos empezamos a preocupar. Qué le íbamos a decir a Bocha, el papá de Gastón, “Su hijo murió en una misión secreta”, no nos iba a creer. Para cuando Pablo y Gastón aparecieron nosotros estábamos preguntando por la comisaría más cercana para hacer la denuncia por la desaparición de dos de nuestros soldados.

Los pibes contaron que el personaje en cuestión, los llevo hasta la entrada de un edificio, les pidió la plata y que en un ratito volvía, pero nunca volvió, se esfumo como por arte de magia. Sabían que no iba a volver pero por las dudas se quedaron un rato mas, contó Gastón.

Pensábamos que iba a ser una noche de risas, terminamos siendo el hazme reír de un sujeto con agallas.

 
 
 

Entradas recientes

Ver todo
Un tipo del conurbano

Entonces él les contó una historia… -Un hombre (como cualquier hijo de vecino), fue a laburar una mañana. Iba de San Justo hasta San...

 
 
 
Diciembre de 1987 (interactivo)

Hola Frank : En estas fechas siempre estamos estallando desde el océano porque se cumplen 35 años de la muerte de Luca Prodan. Lo...

 
 
 
En el 2000

Mi mamá me manda a comprar de vez en cuando, a veces no quiero ir, bajar veintiún pisos y caminar hasta la almacén de Moni, que es...

 
 
 

Comentários


Publicar: Blog2_Post

Formulario de suscripción

¡Gracias por tu mensaje!

  • Facebook
  • Twitter
  • LinkedIn

©2021 por Relatos, cartas, anécdotas y otros disparates mas. Creada con Wix.com

bottom of page